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El Dr. William Cruz impartiendo una capacitación de Fundonar Colombia
04/05/2020

La donación de órganos sigue siendo un tema tabú en Colombia, en gran medida debido al desconocimiento sobre los procesos para donar, la falta de confianza en el sistema de salud y algunas interpretaciones erróneas de la religión. Esto genera una grave problemática para los miles de pacientes cuya vida depende de la donación. Fundonar Colombia, una organización sin ánimo de lucro que hace todas las actividades de gestión de la donación para hospitales trasplantadores en Bogotá, Medellín y Barranquilla, tiene actualmente más de 2900 personas en lista de espera de órganos. Sin embargo, para el 2019 recibió sólo 417 donantes. Muchas personas tienen que esperar meses, inclusive años para poder ser trasplantadas, otras, mueren sin tener esa oportunidad.

William Cruz Mususu, Médico de la Universidad de los Andes y estudiante de la maestría en Ingeniería Biomédica, es parte del equipo de médicos de Fundonar que trabaja en el proceso de conseguir y preparar los órganos para su donación. El doctor también asiste las cirugías de trasplantes y desarrolla actividades de educación y concientización. Mundo IBIO entrevistó al doctor Cruz, para conocer cómo es su lucha por salvar vidas:

Mundo IBIO: ¿Cuáles son los retos más grandes para convencer a las familias a donar?

W.C.: Hay muchos mitos en torno a la donación, algunos totalmente infundados, cómo el cuento de que a la gente la desaparecen y amanece en una tina con hielo y sin riñones. Otros, como que pacientes con enfermedades con diabetes o hipertensión no pueden donar. Hemos tenido casos de donantes incluso con VIH, que pueden beneficiar a pacientes en lista de espera que también tienen VIH.

Muchas personas suelen confundir la muerte encefálica con el coma y otros estados vegetativos. Sólo se puede donar en caso de muerte encefálica; es decir, el corazón y los pulmones siguen trabajando y protegen el estado de los demás órganos, pero la persona es declarada médica y legalmente muerta. La regla de oro para todos los actores de la Red de Trasplantes es “nunca se mata a una persona para trasplantar a otra”. Cuando las familias no saben o no logran entender esto, se niegan a donar porque sienten que le estamos haciendo daño a su ser querido.

También, hay muchas ideas erróneas con respecto a la forma en que se trata el cuerpo del donante o sobre lo que estipulan las religiones. Estos procesos son llevados a cabo por personal altamente calificado, siempre con total respeto por el donante, no se mutila ni se desfigura el cuerpo. Al revisar las posturas oficiales de las principales religiones del mundo, todas ubican la donación de órganos y tejidos como un acto de amor y misericordia. Por ejemplo, la Iglesia Católica a través de sus últimos tres Papas ha alentado a la gente a donar.

Mundo IBIO: ¿Cómo maneja el momento de diálogo con las familias qué están viviendo un proceso tan doloroso?

W.C.: El momento de hablar con las familias es de los más críticos para la donación. Es un evento que puede llegar a ser a la vez extremadamente doloroso y a la vez un respiro completo. Después de que el médico a cargo del paciente informa a la familia sobre el fallecimiento por muerte encefálica, es el turno de nosotros para hablar, y para ello tenemos varias consideraciones: 1) darles tiempo a las personas, la muerte encefálica no es fácil de entender. 2) Ser claros, honestos y utilizar el lenguaje con sensibilidad. 3) Tener empatía y compasión. Una muerte siempre es una tragedia para los seres queridos del fallecido, a pesar de no sentir el mismo dolor de ellos, podemos identificarnos con la difícil situación que viven e intentar dar apoyo a través del diálogo.

Mundo IBIO: ¿Cómo es el proceso de donación de un órgano?

W.C.: Todo proceso de donación se hace con estricta vigilancia de los entes regulatorios de la salud. Garantizamos que la asignación de órganos sea para las personas más enfermas y más compatibles, con el fin de que se genere el mejor beneficio y se reduzcan los eventos adversos (rechazos, mal función y pérdida del injerto).

Vale la pena aclarar que, una vez la familia autoriza la donación no pasamos de inmediato a salas de cirugía, sino que se inicia un proceso llamado “mantenimiento” en el cual tratamos de optimizar por medio de medicamentos y líquidos la función de los órganos. En simultáneo, practicamos los exámenes de función de los mismos, de enfermedades transmisibles y las de compatibilidad con los pacientes en lista de espera. Después, se organiza la logística para la cirugía de rescate. Es uno de los momentos fundamentales, ya que si hay alteraciones podemos corregirlas, y es también cuando cuadramos todos los detalles con el fin de reducir los tiempos entre la extracción y el trasplante al receptor. Esto puede incluir el organizar vuelos charter para diferentes ciudades del país, jamás se envían fuera de Colombia, ni se trasplantan a extranjeros.

Otros desafíos son lograr mantener una buena temperatura del órgano mientras está siendo transportado (tiene que estar frío, entre 4 y 10 grados centígrados), que la cirugía se haga con todo el equipo necesario y en los tiempos adecuados. Trabajamos en el grupo de Biología Matemática y Computacional (BIOMAC) para optimizar estas prácticas.

Mundo IBIO: ¿Qué mensaje tiene para nuestros lectores?

W.C.: Hablar y pensar sobre muerte resulta difícil e incluso perturbador para muchas personas, más aún cuando nos referimos a un ser querido. Pero es más duro llegar al momento de la muerte sin haber resuelto estos temas. Tener esta discusión es como dejar un testamento sobre nuestro cuerpo, nadie puede obligarnos a donar, donar es dar voluntariamente y esa voluntad, manifestada en vida, se debe respetar al momento de fallecer. La invitación es a tener esta discusión que, aunque pueda ser incómoda es muy importante, ya que puede salvar vidas. Mi propósito es hacerlos parte de la cultura de la donación, cada vez que una persona dona puede ayudar hasta a 55 personas. En cualquier momento podemos convertirnos en donantes o en necesitar de la misericordia de un donante.

Las personas interesadas en aprender más del trabajo de Fundonar Colombia puede visitar el siguiente sitio web.