Un grupo de pares académicos visitó las instalaciones del Departamento de Ingeniería Biomédica de la Universidad de los Andes como parte del proceso evaluador que atravesamos para conseguir la acreditación de alta calidad para la Maestría en Ingeniería Biomédica que otorga el Consejo Nacional de Acreditación (CNA).
Durante la jornada de la visita de acreditación, que inició el 28 de noviembre de 2022 y se extendió por tres días, los pares académicos se reunieron con administrativos de las diferentes áreas del Departamento de Ingeniería Biomédica, la Decanatura de la Facultad de Ingeniería, la Oficina de Egresados, la Decanatura de Estudiantes, la Dirección de Internacionalización, Educación Continua, la Dirección de Biblioteca y Rectoría.
Así mismo, los pares académicos se reunieron con estudiantes, egresados y profesores del programa de pregrado en Ingeniería Biomédica. También visitaron los laboratorios del Departamento y el campus de la universidad.
La acreditación de alta calidad es un proceso voluntario que genera confianza entre estudiantes, egresados y empleadores sobre su programa.
Una de las principales ventajas que traen estos procesos de acreditación es asegurarles a los estudiantes que su programa cumple con el estándar global de educación técnica en su profesión. Esto permite mayores posibilidades de homologación en el caso de que los estudiantes quieran seguir su carrera en el exterior. Por lo tanto, tener un programa acreditado se convierte en un sello de confianza para empleadores nacionales y regionales.
El ejercicio de autoevaluación que requiere este proceso de acreditación es un factor importante, ya que todo el departamento se evalúa así mismo, sus fortalezas, sus debilidades, sus diferenciales ante programas nacionales e internacionales, a nivel académico, de investigación y sobre procesos administrativos. Esto permite llevar a cabo un proceso más estratégico para revisar cuáles son las prioridades y establecer un mapa de ruta hacia dónde debe ir el programa de maestría.
"Las acreditaciones son una oportunidad para que una mirada externa y objetiva revise nuestro sistema de calidad, que a su vez genera un ciclo virtuoso que nos permite reconocer la condición de nuestro programa y fortalecer el proceso de mejora continua", aseguró Camila Botero, coordinadora de relaciones externas del Departamento de Ingeniería Biomédica.